Romberg era uno de los magos más poderosos en el Ejército del Señor Demonio, y en una de sus expediciones encontró a un bebé humano, en lugar de eliminarlo, decidió criarlo como si fuera su nieto.
El mago decidió darle el nombre de Ike a su nieto, y desde muy joven le enseñó a desarrollar sus habilidades con la magia. Pero además, Ike no es un humano cualquiera y aunque fue criado como un demonio, tiene la memoria de un humano intacta.
Años después, gracias a sus habilidades, Ike ya está al frente del Séptimo Cuerpo en la armada. Y a pesar de su juventud, ha sido enviado a arrebatarle la posesión de un importante pueblo a los humanos.
Debido a sus memorias como humano, Ike busca prevalecer sin provocar una masacre, aunque algunos de los demonios preferirían terminar por completo con los humanos.
La estrategia de Ike es devastadora y no tarda mucho en conquistar el pueblo, pero a diferencia de otros demonios, Ike ordena a sus tropas a curar a los heridos y preparar la transición de poderes de manera pacífica.
Con razón, Ike le explica a sus subalternos que los humanos terminarán pagando impuestos a los demonios, por lo que es mejor tenerlos sanos y convencidos de que no serán asesinados.
Ike se encierra en una oficina del pueblo y se quita la máscara que cubre su rostro humano, pero en su descuido termina siendo visto por Sattie, una esclava que se escondía en el lugar.
En esos instantes, es llamado para que visite la cámara del Señor Demonio, a quien Ike jamás ha visto. A su llegada, lo recibe Cefiro, la única persona, además de Romberg, que sabe su secreto.
El Señor Demonio termina siendo una joven, Dairokuten, con un extraordinario poder; sin embargo, Ike es capaz de esconder su identidad mientras ella le designa la tarea gobernar y reconstruir la región apenas conquistada.
En lugar de forzar a los humanos a realizar el trabajo, Ike decide emplearlos y ayudarlos con la fuerza de los demonios, mientras tanto, luego de hablar con Sattie, le pide que trabaje con él y no divulgue su identidad.
(魔王軍最強の魔術師は人間だった)