
A muy temprana edad, Ein quedó huérfano. Y en este mundo de magia, en el que los hijos heredan el oficio de sus padres, Ein se ha quedado sin nada.
Sin un camino que seguir, Ein intenta convertirse en aventurero; sin embargo, sus habilidades solo alcanzan para ser un evaluador, que lo coloca de inmediato al fondo de su nueva profesión.
A pesar de ello, Ein intenta buscar una oportunidad, y solo un par de aventureros se la dan. Y para su mala fortuna, lo tratan peor que a un criminal.
Durante una exploración, y luego de haber sido humillado por Zoid, el grupo encuentra el cadaver de un perro del infierno.
Ese tipo de monstruo no debería estar en esa parte del calabozo, y más adelante encuentran otro, y muchos más. Zoid apresura a Ein para que haga su trabajo, pero él insiste en que deben salir antes de que ocurra un accidente.
Y como era de esperar, un grupo de perros del infierno los acorralan, al parecer han salido de sus territorios en busca de alimento, y cuando el ataque es inminente, Zoid le ordena a su compañera que inmovilice a Ein mientas ellos escapan.
Ein recibe varias mordidas, lo cual rompe el hechizo y le permite buscar la salida, pero Zoid lo ha vuelto a traicionar y ha bloqueado la única salida.
La vida de Ein pasa por su cabeza, y al borde de un abismo, decide que es mejor caer, a ser devorado con vida.
Sorprendentemente, Ein no muere, y Yuuri, el espíritu de un árbol mágico decide curarlo. Al despertar, Ein no comprende que ha pasado, pero no duda en agradecer al inmenso árbol por su ayuda.
Este simple gesto cambiará la vida de Ein, quien junto a Yuuri y su guardiana, Ursula, saldrán a viajar por el mundo entero.
(不遇職【鑑定士】が実は最強だった)



